Todo empezó cuando Enrique terminó sus estudios y se quedo a trabajar en el negocio familiar, ahí fue cuando empezamos a estudiar el mercado de los dulces y nos dimos cuenta que cada vez quedaban menos panaderías artesanas y solo se vendían alimentos industriales. Entonces decidieron empezar a sacar sus productos, ya que son productos elaborados con recetas de su abuelo y su padre, para encontrar los buenos paladares y competir contra productos industriales con mucha peor calidad que los artesanos. Todas nuestras recetas están elaboradas a mano y sin ningún tratamiento.