Hace ya 45 años empezó esta aventura familiar, al principio como un proyecto ganadero y agroalimentario al contar con un gran rebaño de ovejas y un obrador de queso artesano.
Tras finalizar esa primera fase ganadera, se continua con la elaboración artesanal del queso y se procede a la implantación de 80 hectáreas de viña en las fincas que la familia trabaja en Samper de Calanda, Teruel.
Recuperamos variedades autóctonas prácticamente desaparecidas. Desde 2001 elaboramos vinos y espumosos tradicionales.
La idea es desarrollar nuestra labor profesional en nuestro entorno rural, poniéndolo en valor y si es posible creando puestos de trabajo en nuestro pueblo.